Desde Hospital Veterinario de día Tarso queremos contarte más acerca de la displasia de cadera una patología muy seria para la salud de tu mascota que puede mermar su calidad de vida.
La displasia de cadera es una alteración del desarrollo que afecta con frecuencia a perros de raza grande o gigante pero también puede afectar a perros de raza pequeña y con menor frecuencia a los gatos. Su origen es genético y se ve afectada por diversos genes. Otros factores como la obesidad, ejercicios inadecuados, tipo de suelo etc… también pueden afectar al desarrollo de la cadera. Existen diferentes tipos y grados de displasia.
Síntomas de la displasia de cadera
- Cojera
- Dificultades para sentarse y levantarse
- Intolerancia o rechazo al ejercicio
- Pérdida de masa muscular en las extremidades posteriores, especialmente de mayores
- Rigidez en la forma de andar
- Alteraciones del comportamiento por dolor (aumento de la irritabilidad)
La medición del Ángulo de Norberg es uno de los métodos que nos permite valorar y clasificar el grado de displasia. Este se calcula mediante dos líneas entre los centros de ambas cabezas femorales y el borde anterior del acetábulo. En un perro sin displasia, este ángulo debe ser de mayor de 105 grados.
¿Cómo se trata la displasia de cadera del perro?
El diagnóstico precoz de la enfermedad puede disminuir o incluso prevenir la artritis a largo plazo que provoca la displasia de cadera en los perros. Existen varias opciones para el tratamiento de la displasia de cadera canina, incluyendo algunas opciones quirúrgicas, así como la gestión de la enfermedad a través de medicación.
El veterinario tendrá en cuenta muchos factores antes de recomendar el tratamiento adecuado para tu perro. Tu mascota deberá someterse a una evaluación ortopédica completa antes de determinar si la cirugía o el tratamiento médico son adecuados para ella.
Tratamiento conservador
Cuando la displasia de cadera en perros y sus síntomas aún son leves, el tratamiento se basa en la aplicación de diferentes terapias encaminadas a aliviar el dolor y retrasar el avance de la enfermedad:
- Terapia farmacológica contra el dolor
- Control del peso a través de dieta adecuada
- Fisioterapia y rehabilitación para fortalecer la masa muscular, corregir posturas compensatorias, etc
- Uso de suplementos nutricionales que favorezcan la protección articular
Tratamiento quirúrico
Si tu perro es adulto y tiene síntomas claros que no mejoran con el tratamiento conservador, o si es muy joven y es viable corregir la posición de su articulación, puede convenir operarlo.
Como siempre, es el veterinario quien debe decirte qué tratamiento es el más indicado para tu compañero.
¿Cómo prevenir la displasia de cadera?
Algunas de las claves para prevenir esta patología son:
- Darle alimentación de calidad a nuestros cachorros
- Cuidar la ingesta de comida para evitar el exceso de peso, especialmente cuando es cachorro
- Realizar ejercicio moderado (evitando actividad física brusca e intensa), lo que contribuirá al desarrollo muscular sin riesgo de sobrecargar articulación.
- Visitar al veterinario
Si tu perro tiene alrededor de 12 meses y quieres valorar sus caderas, nuestro especialista en traumatología Daniel Ruescas puede ayudarte.
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