Es posible que hayas notado que cuando vuelves con tu perro o gato a casa del veterinario o de la peluquería, tus otros animales le dan la espalda, actuando como si no lo conocieran, o aún peor, pueden reaccionar agresivamente. Esto se debe a que pueden oler o verse diferente, lo que genera miedo y ansiedad en los demás individuos.

Te damos algunos consejos para ayudar en la reintroducción:

  • Una reintroducción negativa da como resultado un recuerdo negativo de larga duración. Hay casos, sobre todo de gatos, que ya no pueden vivir juntos después de que una reunión salió mal. Por tanto, estate preparado.
  • Controla el momento de la llegada colocando a los demás individuos con correa, restringiéndolos a otra habitación o manteniéndolos detrás de una puerta para bebés. Esto evita que corran hacia el que regresa.
  • Proporciónale un sitio seguro para relajarse en soledad, sobre todo si ha sido sedado o se le realizó algún procedimiento que no lo haga sentir bien. Una vez que vuelva a ser él mismo, puedes implementar una reintroducción controlada.
  • Mezcla sus olores. El olfato es muy importante para ellos. Los gatos, especialmente, parecen reconocerse entre sí por el olor. Los perros y los gatos pueden ser sensibles a los olores desconocidos, como los antisépticos o los productos de aseo. Trabaja para familiarizarlos con los olores de los demás permitiéndoles olfatear a través del espacio debajo de una puerta cerrada. También puedes mezclar artificialmente sus aromas: coge un paño seco y permite que tu gato o perro lo frote o lo acaricie suavemente. Haz lo mismo con todas los animales y deja el paño al aire libre para que se acostumbren a los olores de los demás. Las feromonas calmantes, como Feliway o Adaptil, también pueden ser útiles para promover una reintroducción armoniosa.
  • Dar un paseo. Lleva a los perros a caminar juntos. La distracción de hacer una actividad normal juntos en territorio neutral puede ayudar a restablecer la familiaridad entre ellos. Lo ideal es que cada perro sea paseado por una persona diferente.
  • ¡Fiesta! Los gatos pueden distraerse con una sesión de juego o una comida especial para cada gato a distancia unos de otros. Los perros pueden distraerse pidiéndoles que realicen alguna conducta que ya sepan o trucos y reforzándolos con premios.
  • La regla de los tres segundos. Es normal que los otros quieran oler al que vuelve con olores diferentes. Pero el olfateo prolongado puede hacer que se sienta incómodo. La regla de los tres segundos consiste en contar hasta 3 y llamar su atención con calma aplaudiendo suavemente o diciendo sus nombres en un tono alegre. Mantén la calma y evita crear tensión. Llámalos para conseguir un juguete o que te sigan hasta el bote de premios.

Si nota un interés excesivo hacia el individuo que vuelve o los indicadores del lenguaje corporal de miedo, ansiedad o estrés, como congelación, andar lentamente, esconderse, levantar los belfos, gruñir o sisear, por ejemplo, sepáralosy trabaja en una introducción más gradual.

Sigue estos consejos y todo volverá a la normalidad antes de que te des cuenta. El tiempo de la reintroducción depende de los animales y de las circunstancias. Algunos tardan solo unos minutos en reanudar una relación normal, pero otros pueden tardar horas o incluso uno o dos días, no tengas prisa y busca asesoramiento especializado si tienes dudas o algo no va bien.

Por Rosana Álvarez

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